La UDP logró su objetivo estratégico definido en el período anterior de consolidar y financiar un proyecto institucional complejo y de calidad a la vez que simultáneamente implementó la política de gratuidad. La Universidad se ha posicionado dentro del sistema de educación nacional como una universidad de un volumen de estudiantes relativamente alto, a la vez que selectiva en admisión y diversa en la composición socioeconómica de su comunidad estudiantil. Además, se trata de una universidad dotada con niveles destacados en cuanto a la productividad e impacto de su investigación científica, con doctorados acreditados en diversas áreas del conocimiento; orientada por políticas, estructuras y capacidades de gestión académica y aseguramiento de la calidad; con mecanismos eficaces de planificación y control presupuestario y financiero, y con comunidades académicas consolidadas en cuanto a su volumen, certificación académica, compromiso docente, capacidad investigativa y orientación a la esfera pública; reguladas por un sistema de reglas y procesos que han asentado una carrera y cultura académica basada en el mérito, el pluralismo y la independencia crítica.
Al año 2026 la UDP busca ser reconocida y valorada ampliamente como una universidad compleja y de alta calidad y reputación; selectiva a la vez que diversa en la composición de su comunidad estudiantil; inserta en redes nacionales e internacionales de conocimiento; con comunidades académicas consolidadas, pluralistas y con una marcada orientación pública e independencia crítica; con un proyecto académico e intelectual que articula e integra sinérgicamente los procesos formativos de pregrado y postgrado con la investigación, innovación y creación, así como con la vinculación con el medio y la internacionalización; que fomenta una formación general e interdisciplinaria que contribuye a la comprensión y resolución de los desafíos sociales, económicos, medioambientales, tecnológicos y culturales de su tiempo y del entorno local y global.
El objetivo estratégico general de la Universidad Diego Portales para el período 2022-2026 es impulsar y certificar en sus procesos de acreditación un proyecto intelectual complejo, de calidad y competitivo que logre: i) una mejor integración y sinergia entre sus áreas de desarrollo, y que esta articulación tenga como foco el fortalecimiento de la formación de sus estudiantes; y ii) contribuir a la compresión e incidir –a través de la formación y la generación de conocimiento– en los cambios, tendencias y desafíos del entorno social, económico, medioambiental, tecnológico y cultural a nivel nacional e internacional.